Si todas aquellas personas que ocupan simultánemante puestos en consejos de dirección, consejerías delegadas, consultorías, fundaciones, presidencias, lobbies, organismos varios y cargos vitalicios, ocuparan únicamente uno de ellos, y cedieran el resto de labores a otras personas, una de dos, o se rebaja el índice de paro al menos durante un mes, o por el «fenómeno de las sillas romanas» (aquel que todo ocupa una silla lo más deprisa posible al pararse la música), algunos de los que nos dedicamos «a barrer», podríamos ocupar una dirección general de alguna empresilla…aunque sólo fuera para acabar de hundirla…