Libro: Guía de los quesos de España

Si recordáis cuando os hablé del libro El manual del inventor, Pep Torres nos aconsejaba leer cosas que no tuvieran nada que ver con nuestra profesión o dedicación en ese momento, puesto que despejas la mente o simplemente te lo pasas bien. Y esto es precisamente lo que he hecho…

BIen, entrando en el libro, aunque pequeñito, es denso, y la verdad es que me lo he pasado bien leyéndolo, aunque debo reconocer una cosa, soy bastante fan de los quesos, que por suerte en este país (España), son muchos y muy buenos, aunque dicen los que me conocen, que yo soy fan del queso, de los embutidos, de las verduras, de la pasta, de la fruta, de la carne !y sí! tienen razón, que hay mejor que una buena comida…

Esta guía recoge información sobre muchos tipos de quesos de la península, pero va un poco más allá, y nos explica sus orígenes, elaboración, conservación, curiosidades…por ejemplo, aunque el origen del queso no está muy claro ¿sabíais que cuenta la leyenda que el queso lo descubrió un anciano pastor de ovejas, al matar una para comer su carne y guardar la leche de esta en el estómago del animal? Resultó que se cuajó y nació el queso…¡gracias pastor! ¡te quiero! Otra curiosidad ¿sabíais que el queso manchego es el más imitado del mundo?

En el libro habla un poco sobre alimentación, pero como soy de los que opinan que no es buena idea generalizar, y mucho menos recomendar, y creo más en el «estudio a la carta» que preconiza mi querido Punset (aunque sea en otras disciplinas), sólo os diré que me ha hecho gracia la frase: «…el ser humano puede vivir, sin sufrir enfermedades carenciales, consumiendo, queso, pan y fruta…».

Otro hecho que he aprendido de este libro, y en el que nunca había pensado, es que el animal (relacionado con el queso), que mejor se ha adaptado a las tan variantes condiciones climatológicas de España (de un sitio a otro), ha sido la oveja ¡y es verdad! hay ovejas en casi todas las comunidades. Y para colmo, demostrando que el conocimiento esta ahí fuera, he conocido sobre un libro medieval llamado el «Llibre de consolat de mar«, que es considerado el origen del derecho marítimo internacional…ahí es nada.

Una pequeña información que os será muy útil si algún día vais a un concurso de la tele ¿sabéis que diferencia un queso artesanal de uno industrial? Pues que los artesanales son elaborados con leches crudas, ordeñadas o recientemente extraídas, y el industrial se elabora con leches pasteurizadas, para cumplir con las normativas vigentes…

Para acabar una idea que me hizo mucha gracia, relacionada con el comentario anterior. En uno de los quesos, nos explica que el pastor sabe cuando está el queso en su punto clavando un palo de olivo con cuatro ramificaciones en su extremo…y si pensamos un poco en esto ¿sabéis la de sistemas que llegan a hacer falta para controlar esto mismo en una producción industrial? jajajaja Varios sensores, un montón de cableado, un control de calidad, varios ordenadores, etc….y el pastor con su ramita que lleva en la boca nos dice lo mismo… ¡qué mundo!

Bueno, si os gustan los quesos y queréis saber más cositas sobre ellos, este es vuestro libro, os lo recomiendo, una pequeña guía que se lee rápido y despierta una sana curiosidad…comer.

Ficha técnica

Autor: Rodrigo Mestre

Título: Guía de los quesos de España

Tema: Guía práctica

Páginas:126

Editorial: Plaza & Janés

ISBN: 84-01-37616-5

Actualización: Quién podía sino yo, escribir una actualización en un artículo, sin tan siquiera haber sido publicado…¡qué le voy a hacer!¡asinen semo!

Pues nada, que se ha dado una terrible coincidencia, y quería haceros partícipes (visuales, lo siento) de ella, y que viene a demostrar lo hablado en el artículo. Mi padre, gallego, mi madre, manchega; los he ido a recoger a la estación después de una estancia en el pueblo ¿y que traen para su hijo?

Pues nada, emulando a Don Rodrigo Mestre, desde hoy mismo amigo mío para toda la vida: «llegué a casa, alegre por el reencuentro, al entrar en mi cocina y dejar la bolsa sobre el pulido mármol, quedé seducido por una bocanada de rancios aromas emanados por los redondos quesos, que golpearon mis sentidos hasta hacerse con el control de mis movimientos, y obligaronme a tajar un fresco manchego, que sintiendo el frío acero bajando entre sus pocos agujeros, dejaba escapar un poco de su preciado suero, produciendo prolongados restañidos en su roce, haciendo gozar el último de mis sentidos…».

¡Jooooooooder! Me acabo de marcar una «oda al queso» que ya quisieran los guionistas del Wyoming…

3 Comments

  1. Ole,ole y ole.
    Se te va la olla!!
    Pero el artículo es interesante y está bien salir de la temática habitual.

    A mí me gusta la historia del queso asturiano afuega’l pitu (en castellano ahoga al pollo). Una de las teorías del nombre era que para saber si el queso estaba en su punto se lo daban a probar al pollo. Si al pollo le costaba tragar es que el queso estaba en su punto.

  2. Estás simpáticamente pirado Ariete Arias! La pre-actualización es delirante… Con respecto al tema: Comería queso hasta convertir mis venas y arterias en alambres.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.